La crianza saludable en un hogar Cristiano
La crianza saludable en un hogar cristiano comienza con la aplicación de Jeremías 23:29: “la Palabra de Dios es como un martillo que quebranta la piedra”.
Todos los padres, que deben conocer y hacer cumplir esa enseñanza, son los principales guía de sus hijos, son los responsables directos y no debe dejarse esa tarea a ninguna institución.
La psicóloga y profesora María del Carmen Hernández así lo enfatizó al presentar el tema Crianza Saludable el pasado sábado 7 de diciembre a un grupo de padres con hijos menores de 12 años.
La actividad fue coordinada por la pastora infantil, Lilian de Delgado, apoyada por la Pastoral Familiar.
Antes que la presentación de una charla expositiva fue un animado tiempo abierto de conversaciones e intercambio de ideas, que culminó con una dinámica de honda reflexión y con una tarea por grupos a modo de resumen de todo lo aprendido.
La licenciada Hernández desarrolló con la palabra MARTILLO un acróstico para explicar todo el contenido y siempre con sustentación bíblica.
Antes dijo que ninguna disciplina es causa de gozo, pero da frutos. Los padres deben atreverse a disciplinar, no ser permisivos ni sobre protectores y tienen que considerar que tienen hasta 20 años para hacerlo.
Para una crianza saludable es básico un Matrimonio funcional donde reine la Armonía y haya la Responsabilidad de formar con libertad al entender que se necesitan progenitores con carácter.
La T significa dar tiempo de calidad y en cantidad. No ser padre microondas. Horarios estructurados para dedicarlo a los hijos sin olvidar el tiempo de depósito espiritual que es el encuentro familiar alrededor de la Palabra de Dios.
La letra I es el alto interés hacia los hijos de modo que sientan que son amados y tomados en cuenta, proceso vital en el desarrollo de sus vidas.
La L representa los límites . Aprender a decir NO y nunca sentirse culpable por expresarlo, que “el sí sea sí y el no sea no”. La expositora exhortó a los presentes a revisar constantemente el modo de crianza si es permisivo o autoritario conforme a Efesios 6:4.
La otra L es la libertad emocional. “ Los padres deben crear con sus hijos un vínculo de confianza, afectivo donde el niño se sienta seguro y pueda expresar sus temores, emociones y sentimientos de una manera natural.”
Finalmente, la O es la oración recordando a Jeremías 33:3. Rodear a la familia de oración porque hay poder en la madre, el padre y la familia que ora.
La licenciada Hernández en varios momentos de su exposición reiteró que estos tiempos más que nunca son complicados para criar hijos saludables ante una sociedad tan hostil, de ahí el tremendo reto de los padres.
Luis Alberto Díaz
Periodista y presidente del Ministerio de la Pastoral Familiar del Templo el Calvario.
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