Frutos, Dones y Ministerios Espirituales – XVI

Frutos, Dones y Ministerios Espirituales – XVI

El grupo de los dones de poder y el de los dones de fluidez han sido presentados en las últimas entregas de estos mensajes, quedando por presentar el grupo de los dones de la mente. Nuestro Dios, basado en su atributo de omnisciencia previó el deseo de los humanos por obtener poder, la facultad de expresarse y alcanzar el conocimiento, por lo cual, no obstante estos seres nacer provistos de estas facultades físicas, también se las proveyó en el ámbito espiritual por medio de estos dones del Espíritu Santo que estamos tratando en esta serie de Mensajes Pastorales.

El primero del grupo de los dones de la mente que trataremos en esta entrega es el don de conocimiento, que consiste en conocer asuntos que escapan al conocimiento humano, y se encuentran en la mente de Dios, de donde salen y son revelados a aquellos siervos y siervas que poseen el referido don ¡Cuán grandes, inescrutables e insondables son los misterios del Altísimo para ser revelados y entendidos por los humanos! Los creyentes en Cristo, a los cuales el Espíritu Santo se encuentra dispuesto y disponible para dotar del don de conocimiento, debemos estar agradecidos porque al ser rescatados por la redención de Cristo en la cruz, podemos gozar del privilegio de tener acceso al referido don.

Hombres de Dios en el Antiguo Testamento por la gracia divina recibieron el don de conocimiento o ciencia como algunos teólogos lo denominan. Entre esta pléyade de siervos  del  Altísimo  podemos pensar en Noé, quien recibió el diseño  de   parte de Dios para construir el Arca en que se salvaron él y su familia; José recibió el conocimiento de parte de Dios para interpretar los sueños de Faraón en Egipto; el profeta Eliseo recibía el conocimiento de parte del Altísimo de toda la estrategia que el ejército de los sirios preparaba contra el pueblo de Israel;  El profeta Daniel recibió el conocimiento divino para recordar e interpretar el sueño del rey babilonio, Nabucodonosor e interpretar la famosa escritura en la pared que le apareció al rey Persa, Belsasar. En el Nuevo Testamento, el apóstol Pedro recibió el conocimiento del engaño preparado por Ananías y Safira su mujer, así como de la actitud engañosa de Simón el mago en Samaria. El don de conocimiento está a nuestra disposición en la actualidad.

Share

Pastor y fundador de la Iglesia de las Asambleas de Dios Templo el Calvario, Santo Domingo, Rep. Dom.

Recent Sermons