La profecía en la Biblia – XXX

La misericordia de Dios es el tema principal que encontramos en el libro del profeta Oseas. El apóstol Juan dice que “Dios es amor”; es decir, que tanto la misericordia como el amor son atributos de Dios. Estos dos atributos, junto a otros similares intervienen en la compasión del Creador hacia la humanidad caída. El apóstol Pedro dice que “Dios no quiere que nadie se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2 Pedro 3:9). La misericordia y el amor de Dios por la humanidad perdida alcanzó su máxima manifestación cuando entregó a su único hijo para morir en una cruz entre dos malhechores. El hijo de Dios resucitó y ascendió a los cielos y desde allí continúa intercediendo por nosotros.

El libro del profeta Oseas contiene un ejemplo real de lo que significa la misericordia y el amor de Dios. Este libro presenta a una mujer infiel que después de descender a la condición moral más baja es rescatada por su esposo. En esta lección objetiva tiene una participación central el perdón, puesto que no es posible una reconciliación de esta naturaleza sin la intervención del perdón. De la misma manera que este perdonó y recibió a su esposa amancillada para lo cual debía poseer un amor sacrificial, que se da a cambio de nada, Dios también está en la disposición de recibir todas aquellas personas esclavizadas por el flagelo del pecado.

El amor y la misericordia de Dios ofrecidos al pecador a cambio de nada, continúan vigente en este siglo veintiuno. La respuesta de los hombres y mujeres bajo el yugo del pecado debe ser el reconocimiento de su estado, fe en la gracia de Dios y arrepentimiento. Si aquella esposa infiel y descarriada tuvo la oportunidad de ser restaurada y volver a su estado anterior, cualquier persona cuya imagen de Dios en ella se encuentre deteriorada a causa del pecado también tiene que arrepentirse y en un acto de fe regresar a su creador el cual es “amplio en perdonar”. De la misma manera que Oseas recibió a la esposa infiel, Dios recibe al pecador y le perdona y lo restaura en la familia de Dios.

Rvdo. Félix Hernández

Pastor y fundador de la Iglesia de las Asambleas de Dios Templo el Calvario, Santo Domingo, Rep. Dom.