Un matutino para la historia
El matutino realizado el sábado 16 de enero del 2021 pasará a la historia del Templo El Calvario por dos razones principales: por el número récord de participantes y, sobre todo, porque fue dirigido por la “diáspora”, hermanos que pertenecieron a la congregación y emigraron a otras latitudes.
La actividad de oración y alabanzas comenzó a las 6 de la mañana, hora de República Dominicana, a través de la plataforma zoom organizada por el Comité de Oración que contó con la colaboración de Nelly Jorge y de su hija Carmen (Lluberes) González.
Fue parte de los matutinos que se están celebrando desde el inicio del año que en esta ocasión son virtuales, en vista de la situación creada por la pandemia que limita las reuniones presenciales.
En poco más de una hora los participantes tuvieron la oportunidad de orar por diferentes motivos, adorar al Señor con alabanzas en vivo y escuchar una breve meditación de la Palabra de Dios.
Para que conste en la historia cantaron Rode Cueto de Herrera, Arelis y Ronny Viloria y los hermanos Pérez, mientras el hermano Miguel Acevedo tuvo una reflexión acerca del amor práctico.
Los hermanos de la diáspora se conectaron desde Canadá, Texas, Reading (Pennsilvania), Nueva York, Florida, entre otros lugares. Residentes en otros continentes no pudieron hacerlo por razones de horario.
Figuraron además de las familias ya citadas: Armando Hernández, Lourdes Márquez (Morales), Elliot y Rocío Morales, Miguel y Orialì, María Díaz, César Herrera, July Pérez y esposa, Félix Caro, Elisabet Gómez, María Reyes, Josefina, Patricia Mejía, Geidy Santana,. Maribel de Reyes…
Al final del matutino hubo un tiempo de koinonìa virtual en el cual los 104 participantes pudieron intercambiar saludos, hacer chistes, reir a carcajadas y estrechar vínculos. Solamente faltó una picadera cibernética a través de las pantallas para poner punto final al encuentro.
El pastor Félix Hernández saludó a todos los internautas y les deseó prosperidad espiritual y material, al tiempo que exhortó a todos a estar unidos en Cristo.
La pastora Francia de Hernández dijo que no pudo evitar las lágrimas al comprobar la fidelidad de Dios con todos aquellos hermanos que por diferentes razones han tenido que emigrar a otros países, pero que “pueden vivir en la esperanza de que el Señor puede aparecer con la seguridad del levantamiento siempre que seamos fieles”.
La hermana Nelly Jorge, quien fungió como anfitriona, expresó en el último minuto que no obstante la lejanía todos los de la diáspora nunca dejarán de pertenecer al Calvario. Calvario siempre Calvario.
Luis Alberto Díaz
Periodista y presidente del Ministerio de la Pastoral Familiar del Templo el Calvario.
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