El descaro de una esposa
por Redacción TEC
¿Cómo reaccionaría usted si sabe que una mujer le pidió el divorcio a su esposo porque éste era demasiado perfecto?
Es el caso de Caroline Celico, ex esposa del famoso futbolista brasileño Ricardo Izecson dos Santos Leite, mejor conocido como Kaká, un joven creyente evangélico de sólida formación cristiana que contrajo nupcias para toda la vida, pero….
Estuvieron casados durante 10 años, procrearon dos hijos, y ella, cantante y ex pastora también brasileña, concluyó que no era feliz, algo le faltaba porque “el problema es que él era demasiado perfecto para mí”.
Ella lo hizo constar en una declaración que asombró a todo el mundo. En esa declaración descartó que el problema se originara por alguna infedelidad.
““Kaká nunca me traicionó, siempre me trató bien, me dio una familia maravillosa, pero yo no era feliz, algo faltaba. El problema es que él era demasiado perfecto para mí”
Si eso no se llama descaro, entonces cuál es el calificativo.
El famoso futbolista ya retirado de los estadios como jugador activo siempre exhibió un comportamiento ejemplar y terminó su carrera con un brillante testimonio.
En una entrevista Kaká confesó que hizo todo lo posible para que el divorcio no ocurriera para no encontrar conflicto con la fe. “Nos enseñan que el cristiano no se casa para luego divorciarse. Así que me propuse luchar con todo lo que tenía”.
Para lidiar con la situación que vivió se leyó el libro “Prueba de fuego”, un escrito genial que recomienda para todo aquel que confronte problema en su matrimonio.
“Entendí -sostiene- que si eres cristiano y buscas al Señor y quieres seguir, está bien. Si tu pareja no quiere dices amén y vete en paz. No debes forzar las cosas, no puedes obligar a nadie a quedarse contigo”, concluyó.
En el 2007 la pareja fue noticia cuando dieron a conocer que ambos llegaban vírgenes al matrimonio respetando lo que enseña la biblia de que el verdadero amor se alcanza solo con la boda, con el intercambio de sangre, el que la mujer pierde con la virginidad, según sus propias palabras.
Un mes después de consumarse el divorcio anunciaron su reconciliación, pero no fue más que un espejismo y finalmente ambos emprendieron la vida por separado.
Un año después de la separación Kaká volvió a enamorarse y luego de 3 años de noviazgo contrajo matrimonio con la modelo brasileña Carol Días con la que tiene dos hijas.
La que se desanimó porque su esposo era “demasiado perfecto” también hizo pareja con un empresario. En mayo pasado le nació un hijo y “aparentemente” lleva una vida feliz.
Hasta saber si él será tan perfecto como el bueno Kaká.
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